Hace poco fui a la mercería a comprar hilo de algodón que me hacía falta para llevar a cabo un pedido que me habían hecho, como me llevé una buena cantidad de ovillos de algodón en varios colores y mi mercera (-¿se dice así?-) me regaló un ovillo de algodón muy suave de Lanas Stop, más concretamente esta:
(foto extraída de google)
Como veis lleva varias manchitas en diferentes colores, un ovillo bastante bonito pero que no sabía muy bien que hacer con el (-no soy amigo de los degrades, ni de los jaspeados-) así que tenía como opcion o bien hacer algo de punto o utilizarlo en un amigurumi.
Soy extremadamente novato en el mundo del punto, no tenía ningun proyecto en mente y seguramente acabaría fastidiando el ovillo, así que la opción de punto quedó descartada casi inmediatamente.
Cogí el ganchillo y me armé de valor para comenzar un amigurumi que ni siquiera había pensado. Según lo iba tejiendo poco a poco me iba pareciendo mas y mas un monstruito y hasta que no tenía el cuerpo por la mitad no lo vi claro... UN DUENDE!
Y así fue, un duende de sonrisa picara y muy trasto, un amigurumi muy sencillo pero muy simpático (-como veis no tiene mucho mas que la lana tejida, los ojos cosidos y la boca bordada-)
Al final me acabé inspirando en los magníficos amigurumis de MilkyRobot que tienen la característica de ser amigurumis chiquitines, muy sencillos, simpáticos y unos ojos preciosos hechos con lentejuelas que le dan un toque muy personal.
Y como aún me ha quedado bastante de este ovillo y me ha gustado mucho la calidad del mismo, lo más seguro que haga algún que otro proyecto más con el, no se si de ganchillo o de punto, así que si me queréis dejar ideas de lo que se os ocurre hacer con el os lo agradecería enormemente.
Espero que os haya gustado tanto a vosotros como a mi el tejerlo. HASTA PRONTO!